Es controladora, te critica y se entromete en tu vida constantemente. Cuando intentas establecer límites, la resistencia y la culpa resultantes son tan intensas que te dices a ti misma que no vale la pena.
¿Tu madre es narcisista, tiene un trastorno límite de la personalidad o simplemente es difícil?
¿Eres empática, sensible y amable?
¿Te sientes atrapada en la relación con tu madre de las siguientes formas?
– Intentas complacerla, pero nunca te sientes suficiente
– Te sientes responsable de su bienestar emocional
– Tienes problemas para establecer límites sin sentirte culpable o recibes tanta resistencia que terminas pensando que simplemente no vale la pena
Si es así, es probable que hayas caído en las trampas psicológicas ocultas que constituyen el síndrome de la buena hija.
Muchas hijas autoconscientes con madres narcisistas, con trastorno límite de la personalidad o simplemente difíciles saben que necesitan enfrentarse a sus madres y establecer límites sanos. Sin embargo, no se atreven a hacerlo y no saben por qué. Están atrapadas en trampas inconscientes que no pueden ver ni comprender completamente… Atrapadas por las necesidades maternas, las hijas empáticas no ven la manera de liberarse sin sentirse malas personas. No pueden ver estas trampas que las paralizan debido a la culpa o que tienen las mismas discusiones con sus madres una y otra vez sin llegar a ninguna parte, pero yo sí. Y lo que es mucho mejor: sé cómo escapar de esas trampas. Después de ayudar a cientos de «buenas» hijas a liberarse, te ayudaré a ti a escapar y romper el ciclo de heridas intergeneracionales para que puedas:
– Enfrentarte a tu madre con confianza
– Dejar de sentirte responsable de su felicidad
– Establecer límites saludables que perduren
– Desterrar a la madre negativa interiorizada y deshacerte de la inseguridad
– Decir «no» a tu madre sin dejar que la culpa te paralice
Siguiendo mi sistema paso a paso, puedes escapar de esta dinámica destructiva, sentirte por fin suficiente, enfrentarte a tu madre sin culpa, y reemplazar la inseguridad por confianza en ti misma y la vergüenza por autoaceptación. Entonces, tanto si tu madre cambia como si no, podrás liberarte de esta dinámica limitante y reclamar una vida que sea verdaderamente tuya.